Mariana de Althaus (Lima, 1974) es una dramaturga y directora peruana cuya obra se caracteriza por una exploración profunda de las relaciones familiares, la identidad y las tensiones sociales contemporáneas. Su teatro, de corte testimonial y emocionalmente intenso, combina lo íntimo con lo político, abordando temas como la maternidad, la violencia de género y la herencia generacional. Con una prosa precisa y una puesta en escena sensorial, ha construido un universo escénico donde lo cotidiano se transforma en reflexión colectiva. Mi obra favorita de Mariana: El lenguaje de las sirenas.
¿Cómo es el lugar donde escribes?
No tengo un escritorio, escribo donde haya sitio en mi pequeño departamento, si logro encontrar un tiempito entre mis clases, mis obligaciones domésticas y de madre: en la mesa del comedor, en mi cama, en un café. Hasta he logrado escribir una escena en mi carro, esperando que mi hijo salga del colegio. La escritura de una obra de teatro es portátil.
¿Cómo suena el lugar donde escribes?
El silencio es lo ideal para mi. Pero soy capaz de trabajar con bulla alrededor. Nunca música, me distrae.
¿Tienes alguna superstición al momento de escribir?
Ningún ritual ni superstición, sólo necesito mi laptop. Todo lo demás son excusas para no escribir.
¿Cuánto de la historia tienes claro antes de empezar?
Como tengo poco tiempo para escribir, voy gestando la historia en mi cabeza mientras hago las labores cotidianas. Mi forma de protegerme del mundo es imaginar historias todo el tiempo, mientras camino, mientras manejo, mientras lavo los platos. Pero me encanta sentarme escribir a partir de una situación sin pensar mucho, enterándome de lo que pasa a medida que voy escribiendo.
¿Cómo equilibras la inspiración con la disciplina?
No puedo darme el lujo de esperar a la inspiración. Escribo cuando no tengo que trabajar, así que, si en ese momento no aparece, no sale gran cosa; aun así, algo avanzo. ¿Pero qué favorece mi inspiración? Leer. Ver buenas películas o teatro. Escuchar a la gente, oírlos como si fueran parte de una obra.
¿Qué papel juega la reescritura en tu proceso?
No tengo un método, aunque por lo general busco tener una primera versión muy larga y mal escrita para empezar a corregir. A partir de este primer borrador, empiezo la larga etapa de la corrección, que puede durar años, sobre todo las obras de ficción.
¿Qué consejo le darías a alguien que recién empieza a escribir?
Las buenas obras son el grito que el autor no ha podido soltar, el llanto, el reclamo que no ha podido manifestar en la vida. La obra es la contractura, el insomnio, el golpe. No pierdas el tiempo escribiendo lo que "es prestigioso", lo que se espera de ti, lo que crees que te va a colocar en un lugar de notoriedad. Escribe lo que necesitas escribir para seguir con vida y con salud. La prudencia, la timidez, la sensatez déjalas para tu vida, en la escritura deja que salga lo feo, lo inadecuado, lo ingenuo, ábrele la puerta a las bestias, déjalas tomar el mundo.
-